Cómo Sleepytroll ayuda a Ruth

La vida cotidiana es ajetreada, pero con un Sleepytroll puedes hacer más cosas. Ruth Rabbe compartió su historia sobre cómo usa el babyrocker.

Ruth Rabbe tuvo su primer bebé cuando estaba en sus cuarenta y tantos, y no esperaba que su hijo se convirtiera en hermano mayor, pero recientemente lo hizo.

Mientras Ruth estaba embarazada de su primer hijo, leyó todo lo que encontraba sobre bebés y productos para bebés, y estaba bien informada. Como ella misma lo describe, "Me metí de lleno", y Facebook y Google la "bombardearon" con anuncios de productos para bebés, justo como quería. Los anuncios que recibía eran información útil, y no dudaba en quejarse si un producto no cumplía lo prometido.

Uno de los productos que le presentaron fue un "artefacto" que podía mecer un cochecito. Le gustó la idea, pero no estaba segura si realmente necesitaría ese producto. Sleepytroll era la marca más cara del mercado, así que eligió una marca más barata. Cuando llegó el babyrocker no quedó satisfecha, lo encontró demasiado débil y no movía mucho el cochecito. En uno de los sitios de Facebook para madres preguntó qué experiencia habían tenido otras madres con babyrockers, y le recomendaron Sleepytroll porque era más potente y recargable.

El hijo de Ruth no era un niño "complicado" como ella lo describe, pero le gustaba el movimiento mientras dormía. Dormía bien cuando ella salía a caminar, pero se despertaba tan pronto el cochecito se detenía. Cuando terminaba su caminata, encendía el babyrocker para que el bebé pudiera seguir durmiendo, sintiendo que todavía estaba paseando. De esa manera el bebé conseguía el sueño necesario y ella tenía un descanso para poner una lavadora o disfrutar una taza de café.

"Siempre he hecho ejercicio, y continué ejercitándome algún tiempo después de dar a luz", explica. En el gimnasio podían llevar los cochecitos adentro, y el bebé usualmente dormía cuando llegaban. Ella puso el Sleepytroll para que mecer el cochecito, y durante la primera media hora hizo ejercicio sola. Cuando el bebé se despertó, participó en el entrenamiento junto con ella y las otras mamás y bebés.

Un consejo que se les da a los padres de recién nacidos es "duerme cuando el bebé duerma". Es un buen consejo, pero difícil de seguir si tu hijo exige un cochecito mecedor para poder dormir. Ruth dice "Sleepytroll hizo el trabajo por mí, y él consiguió el sueño que necesitaba".

Para su cuna compró resortes para poner debajo de las patas de la cama, pero era difícil mecer la cuna a mano. Ella desearía que el babyrocker tuviera una instalación para que también pudiera usarse fácilmente en una cuna. 

Cuando puede, compra de segunda mano. "Es sensato no ser snob", dice la madre. Como muchas otras, ha sentido la presión de que todo tiene que ser nuevo, caro y elegante para el pequeño, pero realmente al final; "¿Necesita el paño para el babeo ser ecológico y caro?"